2005/06/03

Policías mexicanos exigen literatura filosófica

18 de Marzo de 2005

“¡Queremos leer a Faulkner!”

[ Andrés Pascoe en Neza ]

Tras la decisión del gobierno Municipal de Neza de obligar a sus policías a leer un libro al mes, una ola de protestas de los agentes han invadido a las oficinas del encargado de la Comisión de los Derechos Humanos mexicano, José Luis Soberanes.
“Tenemos miles de reclamos – explicó el ombudsman --, ya que están inconformes con la selección de libros que se les ha otorgado. Les pidieron que leyeran a Gabriel García Márquez, cosa que ha suscitado violentas reacciones”.
El vocero del recientemente creado Movimiento de Policías por la filosofía literaria (MOPFIL), Juan Escobedo, manifestó que “el realismo mágico es un estilo literario plenamente superado, y exigimos se nos otorgue lectura de calidad”.
Entre los autores que la policía del Edomex demanda están Faulkner, Sartre, Kafka, Hobbes, Wittgeinstein y Foucault.
“Sólo seremos mejores policías cuando entendamos a cabalidad la función de los protectores de la sociedad. Cómo dijo Kant, la metafísica es un océano oscuro sin costas ni faros, salpicado con muchos naufragios filosóficos. Lo mismo aplica a las fuerzas policíacas” aseguró Escobedo.
El fenómeno, sin embargo, ha causado mucha preocupación al interior del gobierno. “El MOPFILI aparenta ser un grupo unido, pero sufre de profundas diferencias al interior que están afectando la labor de los agentes” comentó bajo anonimato un funcionario de la municipalidad.
“Ha habido una cruenta pelea entre los seguidores del nihilismo existencialista y los humanistas, llegando incluso al sabotaje”.
La fuente narró el caso de un asalto a mano armada en el cual un policía nihilista solicitó apoyo a una patrulla cercana. Sin embargo, la patrulla estaba ocupada por seguidores de Sartre, que le respondieron por radio “Ey, pinche fan de Nietzsche, tu líder dijo que ‘Aquel que lucha contra monstruos debe cuidar no convertirse en uno también; y si observas por largo tiempo el abismo, el abismo empezará a observarte a ti también’… ¡así que jódete!”, y no se convocó a refuerzos. El policía nihilista murió por las heridas que le provocó el asaltante.
En otra ocasión, un grupo de policías de tránsito se negaron a colocar multas, ya que “La vida pierde el significado en el momento en que se percibe que no es eterna”, explicaron los uniformados, citando a Sartre.
“Esta situación está fuera de control – continúo la fuente anónima –. O los ponemos a leer libros de superación personal o la guerra de los filósofos se volverá profundamente peligrosa”.