2005/06/03

Narcojuniors dejan de lado diferencias de sus padres

2 de Marzo de 2005


“Somos como hermanos”

[ Andrés Pascoe en Guadalajara ]

Tras la detención en Zapopan, Jalisco, de los hijos de dos prominentes narcotraficantes mexicanos, Iván Guzmán Salazar y Alfredo Gómez Díaz, prole de Joaquín El Chapo Guzmán y de Héctor Luis El Güero Palma, respectivamente, se ha puesto en entredicho la idea de las diferencias insondables entre cárteles de droga.
En entrevista exclusiva, el hijo de El Chapo, uno de los más sanguinarios narcos de la historia mexicana, aseguró que “Aunque nuestros padres sueñen con matarse unos a otros, nosotros hemos encontrado en esta amistad algo único”.
De igual forma, aseguró que con frecuencia socializan con los hijos de Caro Quintero y las hijas de La Loba Martínez, ambos importantes distribuidores de cocaína y anfetaminas.
“El revén es inolvidable, pero lo más importante es la amistad” asegura el hijo de El Güero Palma con certeza. “Sé que algún día mandaré a matar a la esposa de mi cuate o a mutilar a sus lugartenientes, pero nuestro vínculo es más profundo que eso”, asegura al tiempo que su amigo asiente.
El hijo de El Chapo va más lejos, al explicar que “amistad es tener en el hombro la mano de mi mejor amigo, mientras realizas tu primer ejecución”, en referencia a uno de los asesinatos que ha perpetrado, en el cual el hijo de El Güero fue su principal soporte emocional. Pero su compañero fue más lejos al asegurar “No, no, no, amistad es nunca decir ‘perdón por robarte un cargamento de coca’”.
Sin embargo, los amigos descartan asociar a sus cárteles y terminar con la guerra entre narcos, ya que mientras el hijo de El Güero se está preparando para heredar el imperio de heroína de su padre, su amigo tiene otros planes.
“Quiero forjar mi propio camino. Empezar pequeño. Quizá con uno o dos picaderos (tienditas de droga). Después ver qué pasa” dice ilusionado, al tiempo que asegura que ya ha empezado gestiones para ser un micro empresario de la drogadicción.